EL CAMBIO SOCIAL
REFORMA O REVOLUCIÓN.
La transición actual da inicio a una nueva etapa del Proceso Revolucionario. Lo que implica definiciones ideológicas para tomar la ruta correcta en este cruce de caminos: reforma o revolución. La reforma es la continuidad del modelo político de la democracia representativa. Es mantener vivo el espíritu pragmático y clientelar del usufructo del poder. Es proseguir el ejercicio del mando sustentado en la fascinación del poder. Es ser tolerantes con los adversarios que siguen dentro del mando de gestión gubernamental y mantener relegados, fuera de todo tipo de influencia política, a quienes mantienen sus convicciones revolucionarias. Es, en síntesis, mandar de espaldas al pueblo.
Por su lado, la revolución, cuyo modelo político es la democracia
participativa y directa significa, antes que nada, transformar el poder en
instrumento del pueblo. Es transferir la toma de decisiones a las comunidades
organizadas. Es gobernar con base en los derechos de la participación
del pueblo. Es darle consistencia constitucional a los actos soberanos del colectivo
nacional. Es reconocer el derecho que tiene el militante, activista o
revolucionario identificado con el Proceso, para expresar sus opiniones y que
éstas sean respetadas. Es también aceptar las decisiones de la base, en todo lo
concerniente al ámbito de su competencia. Es, de manera concluyente, darle
todo el poder al pueblo. Esto es revolución. Cualquier conducta o
decisión que se adopte fuera de este marco conceptual no es revolución, es
reforma.
Por lo tanto, la conducta reformista es la expresión contra-revolucionaria,
pura y simple. Por eso digo que la coyuntura en la cual nos encontramos exige
la definición ideológica de manera inequívoca. O estamos en un Proceso
revolucionario y, en consecuencia, hay que ir a los cambios estructurales de la
génesis social para que mande el pueblo; o, el Proceso es la continuidad de la
reforma pragmática que apunta hacia la perpetuidad de la democracia
representativa.
Se puede definir el cambio social como las transformaciones de
las condiciones de vida de los grupos humanos, de su estructura y de su sistema
de valores.
Cuando se analiza un proceso de cambio social es preciso responder a
ciertas preguntas: ¿qué es lo que cambia? ¿Cómo cambia? ¿Cuál es el ritmo de
cambio? ¿En qué dirección se produce? ¿Cuáles son los factores objetivos y
subjetivos del cambio?
Así, tomando como ejemplo el cambio ocurrido en la familia desde los
tiempos primitivos hasta los actuales, desde la familia extensa a la familia
nuclear, podemos observar el distinto ritmo en los timpos antiguos, más lento,
y en los modernos, más rápido, sobre todo desde la revolución industrial, que
implicó el que se incorporasen las mujeres al mundo del trabajo y que
decreciera, de manera correspondiente el número de hijos. A lo que también
contribuyó el desplazamiento geográfico y la emigración, etc.
Dentro de los procesos de cambio social hay que distinguir
varios conceptos: desarrollo, progreso, evolución social y revolución.
Desarrollo: significa un incremento en la dimensión y en la
complejidad de un fenómeno social o económico. Va muy unido a un proceso
cuantitativo.
Progreso: va muy unido a un proceso cualitativo. Es un incremento en la
riqueza cualitativa de la vida social, en el mejoramiento de las condiciones de
vida de una sociedad. Así, podría darse desarrollo y no progreso.
Evolución social: conjunto de transformaciones que conoce una
sociedad durante un largo período de tiempo. Se asocia a un cambio lento. Ej.:
la evolución de la familia o del trabajo desde los tiempos prehistóricos hasta
hoy.
Revolución: se asocia a un cambio rápido. Es la ruptura violenta y rápida con
la situación establecida. Desde el punto de vista político, será la ruptura
violenta con el orden político y social vigente (p.e., la Revolución Francesa).
Pueden producirse revoluciones incruentas, otras pueden ser científicas,
técnicas, religiosas, etc., cuando los conocimientos, innovaciones y creencias
producen un cambio radical en los diferentes espacios donde se opera (ej: la
ciencia y la revolución que supuso la teoría de la relatividad).
Tanto el desarrollo, como el progreso, la evolución social y la
revolución; como sus contrarios: el retroceso, la regresión, la involución
social y la contrarrevolución son aspectos que se incluyen en el cambio social,
ya sea en una dirección hacia delante o hacia atrás en el proceso.
TEORÍAS DEL ORDEN SOCIAL.
En las ciencias sociales, el orden
social es un conjunto de ligadas estructuras
sociales, instituciones y prácticas sociales para, mantener y hacer
cumplir las formas de relacionarse y de comportarse.
Una "orden social" es un sistema relativamente persistente en
las instituciones, los patrones de interacción y costumbres, capaces de
reproducir continuamente al menos las condiciones esenciales para su propia
existencia. Se refiere a todos los hechos de la sociedad que se mantienen
relativamente constantes en el tiempo. Estas condiciones podrían incluir
tanto las relaciones de propiedad, intercambio y poder, sino también las formas
culturales, las relaciones de comunicación y sistemas de valores.
De esta manera, una sociedad puede ser caótico y disfuncional, pero
todavía hay un orden social en un sentido sociológico puro.
La educación con base positivista
persigue conseguir un individuo inflexible, de mentalidad cerrada,
individualista y a-crítico. No permite la formulación de explicaciones que
requieran un examen crítico y generalizaciones fundamentadas en juicios
críticos.
Desde el positivismo surgieron 2
teorías
Teoría de la conducta: Actúa en el
medio, recibe un estímulo y responde con una conducta que es observable. Es
utilizada para la manipulación del sujeto.
Teoría del Gestalt: En su interacción
con el medio se orienta en función de lo que observa/percibe de la situación
total y de las relaciones que descubre entre las partes y el todo. Empleado la
conducta en base a relaciones que motiven al alumno a resolver situaciones
problemáticas.
Teoría del orden Estructural-Funcional
También llamado funcionalismo
estructural o estructuralista es un enfoque empleado en
ciertas ciencias sociales, especialmente en la antropología y la
sociología que surge después de la Primera Guerra Mundial, emergió en
Francia (Europa) en 1919. Supone que los elementos de una
determinada estructura social son interdependientes entre sí.
Esta teoría la principal preocupación son las grandes estructuras e
instituciones sociales de la sociedad, sus interrelaciones y su influencia
constrictora en los individuos.
El estructural- funcionalismo plantea que el propósito de la sociedad es el
mantenimiento del orden y la estabilidad social, y que la función de las partes
de una sociedad y el modo en que estas están organizadas , la estructura
social, serviría para mantener ese orden y esa estabilidad.
Principales postulados del
funcionalismo son:
*Establecer una analogía de la vida
orgánica y la vida social.
*Realizar funciones especializadas en
los grupos
*Las acciones consientes e
inconscientes de los individuos provocan una movilidad y función de la
sociedad. Refiere a la movilidad como la acción o función que desempeña un
individuo
*Para el estructural-funcionalismo lo
importante es el individuo”
El estructuralismo y el Funcionalismo tienen como base la teoría positivista y
organicista de Spencer, la acción social de Max Weber, y otras.
El Estructuralismo considera que no hay un hecho, humano o social, que no
suponga una estructura. Estructura que está conformada por el modelo orgánico
que plantea un paralelismo entre la organización y la evolución de los
organismos vivos, la organización y la evolución de las sociedades. Estas
encargado de justificar y mantener el orden existente de la sociedad
capitalista. Siguen predominando y siendo bases de nuevos aportes.
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